Al entrar al colegio, todos los niños desde infantil a bachillerato, con sus globos de colores, le dieron la bienvenida hasta llegar a la puerta de la capilla del colegio. Allí, Isabel Zapata, en nombre de todos le dio un afectuoso y cálido recibimiento.
A continuación se hizo un homenaje a María y a la Madre Cándida, dedicándoles una palmera, acto que bendijo D. Vicente Martínez. Terminamos todos cantando canciones en su honor.
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